Fujifilm instax mini 41: una cámara instantánea para la nostalgia del selfie por 110 euros

Por: Anry Sergeev | 08.04.2025, 12:16
Novedad de instax: ¡la cámara instantánea mini 41 que te sorprenderá! Cámara instantánea instax mini 41. Fuente: Fujifilm

Fujifilm nos ofrece un retorno a la magia analógica, esta vez en forma de la nueva cámara instantánea instax mini 41. Es la sucesora de la mini 40, que hace lo mismo pero con un aspecto un poco mejor, tiene un par de funciones inteligentes y cuesta 110 euros. Y sí, sigue siendo una cámara que no se conecta a Wi-Fi, no tiene Bluetooth y no puede enviar fotos al teléfono, porque la idea principal aquí es conseguir un papelito con tu cara al momento.

Entre las actualizaciones está la exposición automática (cuesta creer que estemos escribiendo sobre esto en 2025), que detecta la iluminación y ajusta la velocidad de obturación y el flash. No hace falta girar nada, basta con pulsar el botón y la magia (a veces) sucede. El modo de primeros planos con corrección de paralaje es para los que se hacen selfies al estilo "ojos en el encuadre, barbilla en algún lugar de la zona contigua". El visor se ajusta para centrar al sujeto sin recortar la frente: una función útil, pero no una revolución.

Otra mejora es el diseño. La cámara tiene detalles en naranja, un acabado metálico y un cuerpo texturizado. Sí, es bonita. Y sí, sigue necesitando consumibles en forma de papel fotográfico Instax mini, cada impresión de los cuales cuesta como una taza de café (unos 15 dólares por un paquete de 10 fotos). Pero los estetas y los aficionados al "directo a la mano" saben lo que pagan.

La cámara pesa algo menos que un paquete de azúcar y cabe fácilmente en una mochila o incluso en un bolsillo grande. Fujifilm promete que la instax mini 41 estará disponible en Europa a partir del 17 de abril de 2025, así que prepárate para otra ronda de hype analógico en Instagram (irónico, por supuesto).

En definitiva, la instax mini 41 tiene que ver con el estilo de finales del siglo XX, la sencillez y un poco de impracticabilidad en la era digital. Porque a veces quieres hacer una foto de algo sin pensar en filtros, hashtags y archivos en la nube. Pero por 110 euros, quieres algo interesante y digital, al menos la opción de hacer una doble toma. Aunque, ¿quiénes somos nosotros para destruir la idea misma de las instantáneas, cuya gracia es que no se pueden reproducir?